Publicidad fragmentada: portales preferidos de Yohan Uribe

No hay pretextos ni justificación para mantener una oficina tan costosa, que derrocha millones en una publicidad fragmentada, casi personalizada y ni siquiera para el alcalde. Una dependencia que, lejos de comunicar, repite la inercia y la sospecha.

El expediente incómodo ya está en el escritorio del nuevo tesorero municipal, Javier Lechuga. Apenas asumió el cargo y se topó con papeles que pesan: los contratos de publicidad que orbitan alrededor del director de Comunicación Social, Yohan Uribe Jiménez, alias #LordFragmentado.

El problema no es la publicidad en sí, sino cómo se reparte. Dos portales digitales reciben cheques puntuales y montos millonarios, mientras otros medios tradicionales apenas sobreviven con “pagos por evento”. Una práctica que, más que comunicación institucional, opera como nómina paralela y mecanismo de control.


Contratos espejo

En esta misma columna del 3 de junio, bajo el título “La nómina de Comunicación Social: familia, aliados y ‘críticos’ a modo”https://alcafepolitico.com/espresso24junio/, se documentó cómo la bolsa de medios funciona como planilla alterna. Hoy, documentos oficiales de Tesorería confirman la sospecha: el presupuesto no se distribuye, se fragmenta en pareja.

Los primeros dos contratos del año son idénticos en monto, calendario y facturación:

  • Grupo Rocar de la Laguna, S.A. de C.V.
    Contrato DA/CON/DCSI/001/2025: $3,480,000 anuales.
  • GMB Comunicaciones, S.A. de C.V.
    Contrato DA/CON/DCSI/002/2025: $3,480,000 anuales.

Hasta julio de 2025, ambas recibieron seis pagos de $290,000 cada una, por un total de $1,740,000. La suma conjunta alcanza $3,480,000 en apenas seis meses.

Las facturas son un espejo perfecto: mismas fechas, mismos folios consecutivos, mismos montos. El 28 de marzo cobraron enero y febrero. El 14 de abril, 9 de mayo, 13 de junio y 11 de julio repitieron el ritual. Un expediente duplicado con dos razones sociales, como si Tesorería jugara al “copiar y pegar” con dinero público.


¿Qué venden en realidad?

GMB Comunicaciones, S.A. de C.V.

  • $290,000 por publicidad web.
  • $193,000 por revista digital.
  • Medio: www.gobiernosmexico.com.mx
  • Función: simular presencia digital con estadísticas infladas a punta de bots. Vocería de la 4T, aunque factura desde gobiernos priistas. De 30 interacciones diarias pasó a más de 100 con granjas de perfiles falsos. También aparece en contratos de infraestructura, espectaculares y hasta puentes peatonales.

Grupo Rocar de la Laguna, S.A. de C.V.

  • $290,000 por banners.
  • $193,000 por redes sociales.
  • Medio: www.lagunarecomienda.com
  • Función: disfrazar boletines municipales de “recomendaciones”. Es el único sitio donde las becarias de Comunicación Social publican más notas que el propio portal oficial. “Recomendaciones” bien cobradas, influencia a la carta.

El trasfondo político

La pregunta no es cuánto, sino por qué. ¿Qué méritos tienen estos dos portales para acaparar contratos millonarios mientras el resto sobrevive con migajas? La respuesta lleva directo al despacho de Yohan Uribe Jiménez, señalado por usar la bolsa de comunicación como palanca de control: premio a los obedientes, castigo a los incómodos.

Uribe presume —dicen en pasillos— la extraña magia de traicionar sin mirar. Y de eso ya tomó nota el alcalde, que no quiere más mentiras internas. Tanto, que Eduardo Olmos tuvo que calmar a Armando Cobián, asegurándole que seguiría en su puesto en Radio Torreón.

Si estos portales son de Yohan, él duerme tranquilo: gana más que en su ex casa editora… y con lujos que incluyen, según murmuran, viajes a Japón.


Entre la Tesorería y la Contraloría

Al nuevo tesorero Javier Lechuga le toca decidir si será simple sellador de facturas o si abrirá la caja de cristal. Porque este expediente no es gasto corriente: es la radiografía de cómo la publicidad oficial se convierte en herramienta de manipulación política y enriquecimiento exponencial.

En medio queda Óscar Luján, hoy flamante contralor. Él ya conocía estos contratos como tesorero… ¿o forma parte de la trama? ¿Seguirá la pasividad o se pondrá orden en esta dependencia? De Perales a Ganem y Toño, ya salieron varios del escenario, pero los reclamos siguen llegando.


El verdadero Judas

Los pasillos municipales apuntan a muchos traidores, pero todos los dedos terminan en el mismo: Yohan Uribe, el Judas de esta administración.

Si de algo se habla en Palacio, es de mover las piezas en Comunicación Social antes de que la caja de cristal se rompa en público… y los contratos espejo terminen reflejando algo más que sospechosismo.

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