
Accidente en la Matamoros–Torreón cobra más vidas: suman tres víctimas mortales

Torreón, .– La tragedia en la carretera Matamoros–Torreón sigue cobrando vidas. Este sábado se confirmó el fallecimiento de una joven embarazada y su bebé, quienes viajaban junto con sus dos hermanos. Con ello, suman ya tres las víctimas mortales del accidente provocado por un conductor que manejaba en estado de ebriedad y a exceso de velocidad.
Una familia apagada en segundos
La comunidad lagunera se encuentra consternada por la pérdida de los tres hermanos. Amigos y allegados los describen como personas responsables, trabajadoras y unidas, que no merecían un final tan injusto.
En un mensaje difundido en redes sociales, Elsa Mendívil expresó con dolor:
“Hoy levantamos la voz con el corazón destrozado. No solo perdimos a nuestro amigo Adrián, también fallecieron junto a él su hermano y su hermana, quien además estaba embarazada. Una familia entera apagada en un instante por la irresponsabilidad de una persona que decidió manejar en estado de ebriedad y a exceso de velocidad. Adrián, su hermano y su hermana eran personas responsables, amorosas y ejemplares. Gente que representaba valores de trabajo, unión familiar y respeto por los demás. Hoy exigimos justicia. Que la ley actúe con firmeza y que este caso no quede impune. No se trata solo de nombres, sino de vidas humanas valiosas que fueron arrebatadas, de una madre que quedó sin sus hijos, de sueños que ya no podrán cumplirse. Pedimos a la sociedad y a los medios que nos ayuden a visibilizar esta tragedia. Porque la vida de nuestros amigos y de su familia merece justicia, y porque no podemos permitir que la irresponsabilidad siga destruyendo hogares enteros”.
Exigen justicia y conciencia vial
Familiares y amigos claman justicia para que este caso no quede en la impunidad y, al mismo tiempo, llaman a la sociedad a reflexionar sobre la responsabilidad al volante. El mensaje es claro: el alcohol y el volante nunca deben ir juntos.
La tragedia deja a una madre sin sus hijos y a toda una comunidad marcada por la pérdida, recordando que la imprudencia de unos pocos puede destruir hogares enteros.