
Estados Unidos.cancela visas a músicos mexicanos: ahora fue Grupo Firme, pero no están solos

orreón / Ciudad de México. – El Grupo Firme acaba de sumar su nombre a la creciente lista de músicos mexicanos con problemas para ingresar a Estados Unidos. Su visa y la de su equipo se encuentran bajo «proceso administrativo», según informó la propia agrupación, lo que los obligó a cancelar su participación en el festival La Onda Fest en Napa Valley, California.
Pero no son los únicos. El veto silencioso va más allá del grupo tijuanense y salpica a figuras icónicas y emergentes del regional mexicano.
Una lista que crece
Entre los más afectados se encuentran:
- Julión Álvarez, vetado durante años por presuntos vínculos con lavado de dinero, sin pruebas concluyentes.
- Los Alegres del Barranco, a quienes se les revocó la visa en plena gira, obligándolos a cancelar fechas en EE.UU. sin explicación formal.
- Lorenzo de Monteclaro, ícono del norteño, se ha topado con trabas similares a pesar de su carrera limpia y longeva.
- Los Dos Carnales, originarios de San Pedro, Coahuila, también han tenido dificultades para renovar su visa de trabajo.
- Otros artistas como El Komander, Alfredo Olivas y Gerardo Ortiz enfrentan restricciones intermitentes.
¿Narcocorridos o censura silenciosa?
Aunque no se han dado razones oficiales, el patrón apunta a una política más estricta del Departamento de Estado de EUA., en especial hacia artistas relacionados (o estigmatizados) con el subgénero de los narcocorridos.
El gobierno estadounidense puede negar o revocar visas por múltiples motivos: desde inconsistencias migratorias hasta investigaciones abiertas o incluso contenido musical considerado “contrario al interés público”.
Entre la censura y el control migratorio
El caso de Grupo Firme genera particular ruido porque el propio presidente Andrés Manuel López Obrador los ha calificado como “lo más sano” de la música popular mexicana. Hoy, no pueden pisar territorio estadounidense.
La situación prende alertas en la industria musical y entre los millones de migrantes mexicanos que conforman el principal mercado para estos artistas.
Mientras tanto, el mensaje es claro: en Estados Unidos, la tarima puede esperar… pero el silencio administrativo también se convierte en una forma de censura.